Cosmogonía Normanda

Cosmogonía Normanda

Se intentará explicar de la forma más concisa posible la cosmogonia (o sea, el origen del universo y el mundo) según los normandos, o los mal llamados vikingos.

Como casi todos los cultos paganos, antes de nada había un caos impreciso, donde surgiría un mundo flamígero llamado Muspelheim, después surgiría otro mundo helado llamado Nifelheim, y en medio se encontraba el impreciso abismo de Ginnungagap. Y resulta que Nifelheim estaba horadada por doce ríos, que vertían sus aguas en Ginnungagap, donde se helaban, excepto en las zonas más cercanas a Muspelheim, donde se levantaban grandes nubes de vapor. Y así es como del contacto entre el hielo y el fuego surgirían dos seres: el gigante Ymir y la vaca Audhumla. Ambos tuvieron descendientes. Ymir tendría un hijo y una hija unidos por la cabeza, el germen de la raza de los gigantes; mientras que Audhumla tendría al primer dios: Buri. Buri tendría con una giganta a Bór, y este a su vez, con otra giganta, tendría a otros tres hijos: Odin, Vili y Ve. Pronto dioses y gigantes tendrían sus primeras diferencias, y estalló una guerra que duró miles de años, hasta que Odín y sus hermanos lograron asesinar a Ymir. De su cuerpo broto tanta sangre que todos los gigantes perecieron ahogados, excepto un pareja que daría lugar a la raza de los gigantes que luego habitarían en su propio mundo. Mientras, Odin y sus hermanos construyeron Midgard con los restos del gigante: de su sangre salieron los oceanos, con el craneo la boveda celeste, con los huesos las montañas, con sus cabellos los árboles y con sus sesos las nubes. Para iluminar este nuevo mundo tomaron dos fragmentos flamígeros de Muspelheim y los colocaron en el cielo montados en sendos carros. Eran obviamente el Luna y la Sol (no me he equivocado, los normandos creian que el Sol era femenino y la Luna masculino).

Establecieron un ciclo en su transcurso por el cielo, creando de esta forma el Tiempo.

Tras este triunfo, Odin y sus hermanos crearon a los primeros humanos: el primer hombre se llamo Ask, y fue hecho en madera de fresno, y la primera mujer era Embla y fue creada en madera de olmo. Esta pareja primigenia sería a partir de la cual descendería toda la raza humana, que poblaría Midgard. Todo el universo se sostenía en un fresno llamado Yggdrasil, en el cual se apoyaban los nueve mundos de los que se componía el universo. Tenía tres raices que se hundian en direcciones diferentes: una bajaba hasta el Niflheim, donde se nutría del manantial Hvergelmir; otra iba hasta el Jotunheim, donde estaba el manantial de Mimir, donde se concentraba todo el conocimiento del Universo, y la tercera llegaba al Asgard, al manantial Urd, donde estaban las Nornas, dueñas del destino de los hombres. En las raices de Yggdrasil estaba la temible serpiente Nidhogg, que roia esas raices con el proposito de hundir el arbol.

Queda por último detallar el origen de los dioses. Parece que las deidades se dividieron en dos familias: los Aser y los Vanir. Aunque en ambos grupos habia tanto dioses como diosas, los Vanir representaban los aspectos femeninos de la naturaleza, y los Aser, los masculinos. La convivencia entre ambas razas fue perfecta hasta que la diosa vanir Gullveig fue asesinada por los Aser, dando pie a una guerra. Finalmente se firmó una paz, aunque para asegurar futuros altercados, hicieron un intercambio de rehenes: con los Vanir se fueron los dioses aser Hoenir, Mimir y Kvastir, mientras que a vivir al Asgard de los Aser se fueron Njord y sus hijos Frey y Freya.¿Ilógico? ¿Con agujeros en la historia?. Bueno, no hay que olvidar que la mitología no es una ciencia exacta y generalmente dista de serlo. No obstante este es un resumen, y hay que tomarlo como tal. El origen del mundo según los normandos los podemos hallar más explicado en el Edda de Snorri Sturlusson, publicado por Alianza Editorial entre 1984 y 1986. Esta es una fuente directa ya que Snorri vivió en el siglo XIII y posiblemente a él le debamos el saber tanto de la mitología normanda, ya que esta era una tradición que, como tantas cosas en la Edad Media, se transmitía de forma oral.