Un día de Mayo de 1966, el doctor Javier Cabrera recibe una visita de su amigo Félix Llosa Romero en su consultorio ubicado en el pueblo de Ica, Perú. Le traía un extraño regalo en motivo de su cumpleaños, provinente de unas excavaciones clandestinas que organizaba un campesino del lugar. Se trataba de una piedra ovalada de color negruzco y de aristas redondeadas, que tenía grabada en una de sus caras la imagen de un pez.
Su amigo le aseguró que existían muchas más como esta, con distintos grabados, y el interés de Cabrera se vertió en este gran hallazgo.
LAS TEORÍAS DE JAVIER CABRERA
El doctor Cabrera recolectó una enorme colección de estas piedras y llevó a cabo una exhaustiva investigación sobre el tema, clasificando las piedras en diversos grupos a partir de los símbolos que representan.
Hay piedras que tratan sobre temas médicos, otras sobre temas geográficos, antropológicos, técnicos, zoológicos, etc. Existen series que relatan la forma de la tierra y la distribución de sus continentes antes de las grandes convulsiones geológicas, y otras que narran la evolución de los dinosaurios y su creciemiento.
Gracias al estudio de estas piedras, Cabrera afirma que la historia de la humanidad se desarrolla de manera bien diferente a la que hemos creído hasta el momento. Llega a la conclusión de que la raza que creó estas piedras fue desarrollada por seres extraterrestres mediante el transplante de códigos cognoscivos a unos primates emparentados con el lemur extintos hace 50 millones de años.
LAS SERIES
Medicina
En las piedras pertenecientes a esta serie, se explica de que manera se ejecutaban complicadas intervenciones quirúrgicas, como transplantes de corazón, de cerebro, de riñón, etc.
Se hizo activo el uso de la acupuntura en los partos y las cesáreas. También aparecen los aparatos tecnológicos que mantenían las funciones vitales del paciente estables mientras se realizaban las intervenciones.
Astronómica
Grabaron las trece constelaciones conocidas actualmente por la humanidad. También aparecen lugares lejanos a nuestro planeta dónde se suponía que existía vegetación, vida animal e inteligente.
Astronáutica
En estos grabados aparecen pájaros mecánicos dirigidos por hombres instalados en su lomo. En esta biblioteca se pueden ver los sistemas empleados por el hombre de entoces para vencer la gravedad y para salir al cosmos sin necesidad de combustible.
Animales prehistóricos
En estas piedras se pueden ver diferentes razas de dinosaurios, y en algunas incluso compartiendo escena con los humanos. Algunas de ellas muestras los ciclos biológicos de los sáureos prehistóricos.
Antiguos continentes
La distribución de los continentes que aparecen en los "mapas" glíficos en nada se asemejan a los actuales. En ellos se podrían observar los continentes míticos perdidos de la Atlántida y Mú.
La salida del hombre de la tierra
Según los estudios de Cabrera, la raza que creó las piedras deja grabada su marcha del planeta Tierra rumbo a un planeta de la consteación de las Pléyades. En esta marcha no se incluyeron a todos los hombres, sino tan solo a un grupo llamado los Elegidos.
Un gran cataclismo
Las piedras relatan un gran cataclismo provocado por un desequilibrio en los quehaceres de los hombres. Dos de las tres lunas representadas en muchas piedras cayeron sobre la Tierra, originando la destrucción de esta humanidad. Este desequilibrio estaría originado por la creación de unas pirámides que fueron construidas para captar, transformar y distribuir la energía electromagnética que rodea nuestro planeta.
Flora, fauna y razas del planeta:
En ellas se representan los cíclos biológicos de muchos animales y plantas, algunas ya extintos, u otros que actualmente no son autóctonos de América.
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| Figura del mono encontrada en Nazca |
Es de destacar que algunos de los animales representados en las piedras guardan una estrecha relación con los símbolos encontrados en Nazca, región muy cercana a Ica.
AUTENTICIDAD DE LAS PIEDRAS DE ICA
A estas alturas nos podríamos preguntar porqué motivo no se ha dado más eco a este descubrimiento, y la comunidad científica no se ha planteado la posibilidad de incluir estos hallazgos dentro de la historia de nuestra raza.
La respuesta es sencilla: estas piedras fueron supuestamente encontradas en rios y cuevas, y al tratarse de rocas, no contienen material orgánico para poderse aplicar la prueba del carbono 14. Recordemos que esta técnica se basa en el análisis de restos orgánicos para poder fechar una muestra.
Además de eso, en el supuesto caso de que se pudieran clasificar las piedras en el tiempo y corroborar que se tratan de piezas de hace millones de años, no se podría demostrar que los grabados se hubiesen ejecutado en la misma época.
La comunidad científica siempre ha dado la espalda a este descubrimiento tachándolo de falso, y atribuyendo su factoría a uno de los proveedores más importantes de piedras de Ica que tuvo Cabrera, Basilio Uchuya. No pasaremos por alto que han atribuído la manufactura de nada más y nada menos que 40.000 piezas a un solo hombre, y que es prácticamente una hazaña imposible de llevar a cabo.
Cabrera creó un museo que se puede ver en la actualidad llamado Museo de Piedras Grabadas de Ica, localizado en Plaza de Armas de Ica, Perú. En él están expuestas numerosas piedras pertenecientes a la colección particular de Javier Cabrera.
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